FILOMENA Y EL "BLEQUINAZO". (Tarea 3.1. Elementos virales. Redes sociales y comunicación científica)

Con esta tarea nos adentramos en los fenómenos virales y el por qué de su éxito. En este caso, opté por elegir un fenómeno viral en Galiza: Filomena y su blequinazo (https://www.youtube.com/watch?v=0qg8Pjs3Vv)

Se trata de un fragmento del telediario del mediodía de la TVG (Televisión de Galicia) donde un matrimonio cuenta cómo fue evacuado tras escuchar una fuerte explosión en su casa. Filomena y Delfín relatan los hechos con numerosas onomatopeyas (purrum-pum) y expresiones difícilmente inteligibles, pero el hecho que mayor interés suscitó fue que Filomena utilizó la palabra “blequinazo” para designar el estruendo de la explosión. Dicho término no aparece recogido en ningún diccionario gallego por lo que en Twitter se suscitó toda una polémica sobre la procedencia y significado del mismo.

El vídeo fue publicado por primera vez el 9 de enero de 2020 en la emisión del mediodía del telediario (vídeo original: http://www.crtvg.es/informativos/evacuan-un-matrimonio-en-ponteareas-por-acumulacion-de-monoxido-de-carbono-na-sua-vivenda-4260145) y su difusión en la red se produjo en su versión reducida, demostrando que, efectivamente, los usuarios y usuarias de las redes optamos por contenidos de corta duración.

Este vídeo muestra a un matrimonio que forma parte de la Galiza rural y envejecida, un ámbito que inspira entrañabilidad y afecto entre la mayoría de la sociedad gallega. Sin embargo, también despierta cierta condescendencia y lástima al considerar a estas personas ignorantes y atrasadas, lo que conduce fácilmente a la ridiculización y burla. De hecho, este es uno más de la larga lista de vídeos de personas mayores o del entorno rural que se hacen virales en Galiza. Se trata pues, de contenidos que despiertan emociones diversas: desde el cariño y la admiración de unas hasta la mofa de otros, lo que amplía en gran medida el número de personas que lo visitan y difunden.

Por otra parte, el hecho de que en Twitter se viralizase la palabra “blequinazo” y sus posibles significados, produjo un efecto llamada, pues muchos y muchas usuarias de dicha red visitaron el vídeo para escuchar la misteriosa verba. Además, el movimiento normalizador y de defensa de la lengua gallega se adhirió a la polémica, posicionándose sobre los posibles orígenes de la palabra, lo que aún amplió más su difusión. Así fue que, a través de la mensajería instantánea, Instagram, Facebook, Twiiter... blequinazo pasó a formar parte del léxico popular gallego contemporáneo.

Por último, cabe decir que se trata de un fenómeno viral circunscrito a Galiza, lo que se podría explicar por el idioma (aunque otros elementos virales en gallego han transcendido nuestros límites geográficos) pero también por los códigos culturales que manejamos, donde los sentimientos de amor o desprecio por la ruralidad nos mantienen indisolublemente unidos a ella. Esto nos conduciría a analizar cómo los fenómenos virales responden también al contexto sociocultural de sus destinatarios/as y por qué, un vídeo que se hace viral en una determinada comunidad o pueblo, quizás no tiene el mismo éxito en otra.

Comprobamos pues, como se cumplen las premisas para que un contenido se viralice pues:
a) Despierta emociones, en este caso, diversas según el o la receptora, ampliando su rango de difusión.
b) Genera curiosidad por la polémica creada en torno al término "blequinazo".
c) Se trata de un contido de corta duración pues no se extiende más de 20 segundos .
d) Es de fácil difusión a través de las redes sociales y mesajería.

Paralelamente, el visitar el vídeo nos permite de algún modo participar en la polémica del momento, lo que refuerza el sentimiento de pertenencia a una comunidad. De ahí también nuestro afán por difundirlo y hacer partícipes a más personas que sabemos que pueden estar interesadas o que lo van a disfrutar. Las fórmulas del viejo y convencional "cotilleo", llevadas al plano digital. 

Si a ello sumamos el escaso esfuerzo cognitivo que supone verlo, disfrutarlo y compartirlo, la receta es perfecta y el éxito está servido.